Los diez integrantes del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG) detenidos el año pasado durante un operativo en el rancho Izaguirre, ubicado en Teuchitlán, Jalisco, enfrentarán nuevos cargos por desaparición forzada de personas y homicidio.
La Fiscalía del Estado de Jalisco busca imputar estos delitos adicionales tras el reconocimiento de los detenidos por parte de víctimas que fueron mantenidas en cautiverio.
En septiembre de 2024, autoridades estatales y federales llevaron a cabo un operativo en el rancho Izaguirre, que culminó con un enfrentamiento y la detención de diez Sicarios. Los detenidos fueron identificados como Kevin, Erick, David, Gustavo, Christopher, Juan Manuel, Óscar Iván, Luis Alberto, Ricardo Augusto y Armando.
Inicialmente, fueron acusados por la desaparición de dos personas que se encontraban cautivas en el inmueble, así como por el homicidio de un hombre cuyo cuerpo fue hallado en el lugar.
En los últimos días, tres víctimas de desaparición forzada reconocieron a dos de los detenidos como responsables de su cautiverio, lo que llevó a la Fiscalía a abrir un nuevo proceso por desaparición cometida por particulares.
Además, otra víctima identificó a los diez detenidos, lo que resultó en la imputación de un nuevo cargo contra todos ellos.
Se presume que las víctimas podrían formar parte de las 36 personas liberadas en enero de un campamento de adiestramiento ubicado en la comunidad La Vega de Teuchitlán, a pocos kilómetros del rancho Izaguirre. Esta conexión sugiere una posible red de actividades ilícitas en la región.
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