El caso de la mujer vestida de novia que se hizo viral en Monterrey, al denunciar un fraude de un wedding planner por la pérdida de su salón de bodas, ha dado un giro inesperado.
Lo que inicialmente parecía ser una historia de fraude, resultó ser un montaje publicitario para un salon de eventos que ha destapado una serie de irregularidades.
Según testimonios recogidos por una televisora local, Katia, la supuesta novia, y su pareja Martín, están involucrados en otros fraudes, afectando incluso a amigos y familiares. Se les acusa de engañar a personas en transacciones de compra de viviendas y terrenos.
Los afectados revelaron que Katia fue contratada como actriz para participar en una estrategia de marketing del salón de eventos "Sorrento", administrado por Miguel Ángel Cantú y Gilberto Martínez, figuras conocidas de la televisión regiomontana. La puesta en escena consistía en mostrar a la "novia defraudada" en varios puntos de la Zona Metropolitana de Monterrey, denunciando un supuesto robo de 200 mil pesos por parte de un organizador de eventos.
La revelación del montaje provocó que las presuntas víctimas de Katia y Martín salieran a la luz. Se ha dado a conocer que Martín enfrenta cuatro investigaciones por fraude inmobiliario, con demandas que superan los dos millones de pesos. Al parecer, estuvo preso por estos delitos, pero obtuvo su libertad en algunos casos. Sin embargo, aún tendría dos procesos pendientes.
Las personas afectadas expresaron su decepción y traición, ya que conocían a la pareja desde hace años y habían construido una relación de amistad.
Se sienten engañados y despojados de su confianza y recursos económicos.
Este caso ha generado gran controversia, poniendo en tela de juicio la credibilidad de la pareja y la ética de la campaña publicitaria.