El pasado 21 de septiembre, un grupo de Sicarios llegó a una fiesta familiar y ejecutó a dos personas en un salón de eventos sociales de Teocaltiche, Jalisco.
La ejecución fue realizada por cinco Sicarios del Cártel Jalisco Nueva Generación (CJNG), enfrente de niños, adolescentes, adultos y adultos mayores, que festejaban un cumpleaños.
Entre las personas asesinadas, estaba, Juan Manuel Padilla Ramírez, quien fuera policía estatal de Zacatecas, comisionado en el 2019 al municipio de Apulco.
Padilla Ramírez, hizo público en abril de este año, el levantón de su padre y un hermano, a manos del Cártel Jalisco Nueva Generación.
Además evidenció la relación que había entre el entonces candidato de Movimiento Ciudadano, a la alcaldía de Apulco, Mauro Yuriel Jáuregui Muñoz, y el jefe de plaza del CJNG en ese vértice de los estados de Zacatecas, Jalisco y Aguascalientes, Gerardo González Ramírez, El Apá y/o El Gera, por quien la Fiscalía General de la República, ofrece recompensa a quienes aporten información que los lleve a su captura.
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Mientras tocaba la música y los invitados a la fiesta terminaban de comer en el salón de eventos ubicado sobre avenida Los Arcos de la Colonia Maravillas, un grupo armado preparaba el ataque a unas calles.
Las cámaras de vigilancia, indican que a las 3 de la tarde con 26 minutos, una camioneta blanca de reciente modelo, llega intempestivamente al lugar y es estacionada afuera del salón de fiestas.
Cinco personas, armadas con fusiles de asalto, descienden de la unidad (tres hombres y dos mujeres) y tres de los tripulantes ingresan a donde se llevaba la reunión social.
Cerca del vehículo, aguardan una mujer y un hombre, en espera de sus cómplices.
Aproximadamente en un minuto, los criminales perpetran el ataque; los tres que irrumpen en la fiesta salen del lugar, se encuentran afuera con los otros cómplices, suben a la camioneta y huyen.
Adentro del lugar para eventos sociales, todo eran gritos, llanto y pánico de los asistentes a la fiesta, que presencian el ataque armado y el asesinato de dos personas.
El video grabado por una de las cámaras del lugar, capta los 22 segundos en que uno d los homicidas dispara en contra de dos de los invitados, quienes ya están en el piso.
“!Al suelo, hijos de su puta madre. Les mandan saludos desde Apulco el patrón!”, fue el grito de uno de los criminales, hacia los asistentes, dice un testigo.
Mauro Yuriel Jáuregui Muñoz |
“Todos agarramos a los niños, nos tiramos al piso y escuchamos cómo tronaban los disparos e impactaban en la pared, en el suelo y otros en dos personas que solo tuvieron tiempo de un quejido”, relata.
Cuenta, que al principio, muchos de los invitados creyeron que se trataba de un asalto, pero ya en pocos segundos se dieron cuenta que el ataque iba directo contra un invitado: Juan Manuel Padilla Ramírez.
El certificado de defunción, señala que Padilla Ramírez, presentaba “múltiples heridas penetrantes, producidas por proyectil de arma de fuego, en tórax y cráneo”, lo que le causó la muerte.
En el lugar, también por disparos, perdió la vida el hermano del dueño del sonido que ambientaba la fiesta: Álvaro Villalobos.
Juan Manuel Padilla Ramírez, tenía 38 años de edad; era padre de un joven estudiante y de dos menores de edad, quienes también presenciaron su asesinato a sangre fría.
Juan Manuel, estaba a unas horas de ingresar a la dirección municipal de Protección Civil del municipio de Teocaltiche, Jalisco, donde se refugió tras el secuestro de su papá y de uno de sus hermanos.
Padilla Ramírez, había sido policía estatal de Zacatecas y fue comisionado en 2019 al municipio de Apulco, su tierra natal, donde fungió como escolta de la anterior alcaldesa, Yaneth Morales Huizar, quien tuvo que gobernar ese lugar desde el exilio, al ser víctima, junto con su esposo y escoltas, de un atentado, también perpetrado por el CJNG.
Tanto las autoridades municipales, como algunos policías, huyeron de Apulco, al ser asediados por esa organización criminal, a la que se negaron a servir.
Eso le costó a Juan Manuel Padilla, el secuestro de sus familiares, lo cual evidenció en una llamada telefónica, que le hicieron, Mauro Jáuregui, entonces candidato de MC a la alcaldía de Apulco, en conjunto con El Gera y/o El Apá, lugarteniente del CJNG.
El pasado 17 de abril, se dio a conocer la conversación en la que Mauro Yuriel Jáuregui Muñoz y Gerardo González Ramírez, condicionan a un elementos de la policía estatal, para que “trabaje con ellos”, a cambio de liberarle a sus familiares secuestrados por ese grupo criminal.
El oficial Juan Manuel Padilla Ramírez, junto con otros más, huyó de ese municipio ubicado en el vértice que hacen los estados de Zacatecas, Jalisco y Aguascalientes, por temor a ser asesinados.
El desplazamiento forzado, no solo fue de habitantes y en este caso de policías, ya que meses antes, autoridades municipales también abandonaron Apulco.
El policía estatal, se refugió, junto con algunos integrantes de su familia, en otro de los estados colindantes.
El oficial, recibió ese día una llamada de más de 10 minutos, que le hizo el candidato emecista, Mauro Jáuregui, junto con El Gera.
A cinco meses de que se revelara esa conversación, fue asesinado Juan Manuel Ramírez.
Un día antes, se hacía público que ni Mauro Yuriel Jáuregui Muñoz, alcalde electo de Apulco, Zacatecas, ni el resto del Cabildo, han rendido protesta, a la cual estaban obligados por la Constitución Política del Estado, desde el pasado 15 de septiembre.
Jáuregui, declaró a un medio de comunicación local, que su ausencia se debe a la inseguridad que hay en ese municipio, a pesar de que autoridades federales, así como este y otros medios de comunicación, han documentado su relación con el lugarteniente del Cártel Jalisco Nueva Generación, Gerardo González Ramírez “El Gera” y/0 “El Apá”.