Hacia finales de la década de los 90, Michoacán vio florecer a la industria de la metanfetamina, de la mano del Cártel del Milenio o de los hermanos Valencia, que en asociación con el de los hermanos Amezcua, originarios del vecino estado de Colima, buscaron diversificar sus actividades para superar las limitaciones propias del cultivo y trasiego de la marihuana y amapola, principales productos que hasta ese momento extraía el narcotráfico de la región. Asimismo, los Valencia se asociaron con capos colombianos como Fabio Ochoa, del Cártel de Medellín, para introducir cocaína al país a través del puerto de Lázaro Cárdenas, por el cual también ingresaban la efedrina necesaria para sintetizar el mentado cristal.
Dichas actividades tuvieron un impacto notable en el sur de dicho estado, conformado por las zonas de Tierra Caliente, la Sierra Madre del Sur y la Costa Michoacana; en donde se combinan una serie de características de incalculable valor para los cárteles, como lo son la existencia de una infraestructura adecuada para el funcionamiento de redes de comercio y exportación orientadas a la explotación minera y agrícola, una serranía con territorios más o menos inaccesibles en los que se pueden ocultar sin mucha dificultad plantíos ilegales, así como una amplia franja costera por la cual pueden ingresar y transportarse —a través de la carretera que va de Lázaro Cárdenas, a Manzanillo e Ixtapa-Zihuatanejo, principalmente— diversas sustancias ilegales procesadas y sin procesar.
los primeros cultivos de marihuana y amapola en el sur de Michoacán datan de la década de los 50. El narcotráfico, en dicha zona, fue consolidándose en torno a ellos de manera lenta y sostenida hasta la década de los 80, dándose en los años 90 un crecimiento exponencial que llegó a extender la influencia del cártel local –dirigido por Armando Cornelio Valencia– hacia los estados de Jalisco, Colima y Nayarit. No es aventurado deducir que el auge experimentado por dicha organización en el cambio de siglo es lo que lleva a sus líderes a tomar el nombre de "Cártel del Milenio", en un afán de mostrarse como actores destacados de lo que percibían como un cambio de época.
Los Valencia eran, en cierto modo, un cártel de viejo cuño, dedicado principalmente al narcotráfico. En la región eran percibidos como "gente de trabajo", hijos de una familia de comerciantes abarroteros con cierto arraigo. Y si bien con sus actividades llegaron a afectar la vida de varias comunidades con hechos de violencia, parece ser que en un principio estos no pasaron de ser considerados como meros «daños colaterales» por buena parte de la población. Es hasta la llegada del Cártel del Golfo a Michoacán, mediante su brazo armado en aquel tiempo, Los Zetas, que la gente empieza a resentir los efectos derivados de los negocios de los narcotraficantes.
Entre 2001 y 2006, Los Zetas le abrieron camino a la organización de Osiel Cárdenas Guillén, «tomaron la plaza» y redujeron a los hermanos Valencia a la nada. Con ello, golpearon también al Cártel de Sinaloa, que había sustituido al de los hermanos Amezcua en la alianza para sacar las drogas hacia el norte, cuando este fue desmantelado hacia 2003. Se dice que los Valencia incluso llegaron a reclutar ex kaibiles guatemaltecos para confrontar la embestida del Cártel del Golfo, pero nada evitó que las redes tejidas por éstos durante décadas —las cuales incluían, por supuesto, una buena tanda de políticos, funcionarios y miembros de diversas corporaciones de seguridad del Estado—, pasaran a manos de Los Zetas, quienes establecieron su centro de operaciones en la ciudad de Apatzingán.
Formados a partir de una serie de deserciones del Grupo Aeromóvil de Fuerzas Especiales (GAFE) del Ejército Mexicano, entrenado por militares israelíes y estadounidenses para combatir a movimientos insurgentes como el del Ejército Zapatista de Liberación Nacional (EZLN), Los Zetas implementaron una nueva forma de operación en Michoacán, distinta a la de los viejos cárteles que basaban su disciplina primeramente en lealtades familiares y solo después en la violencia (ciertamente brutal), desarrollando nuevas formas de expolio hacia la población local, cuyos bienes y riquezas fueron vistos como botín de guerra.
Al parecer, el acuerdo con Osiel Cárdenas Guillén fue que mientras el Cártel del Golfo se quedaría con el lucrativo negocio de las drogas, pagándole a Los Zetas una buena cantidad por los servicios prestados, éstos se instalarían en las «plazas conquistadas» para garantizar el flujo de mercancías y dinero, combatir a los enemigos del primero y disciplinar a los criminales locales, teniendo carta blanca para extorsionar a diversos negocios –legales e ilegales– en beneficio propio.
Así, bandas de ladrones, secuestradores, traficantes de indocumentados, tratantes de blancas y narco-menudistas, empezaron a pagar cuotas por «trabajar», sin pena de ser eliminadas y desplazadas; mientras paulatinamente, los cobros y las extorsiones se extendían a negocios que se localizaban en la frontera de lo lícito y lo ilícito, como bares, centros nocturnos y table-dance; para finalmente propagarse hacia establecimientos como tortillerías, gasolinerías, farmacias y tiendas de abarrotes.
Los Zetas no deshicieron al Cártel del Milenio sólo a base de sangre y fuego, muchos miembros de este último desertaron del mismo, ya sea por que estaban descontentos con él o por mero oportunismo, integrándose a las filas de los primeros, conformando la semilla de lo que a la postre sería una escisión que acabaría por expulsar a los fuereños, «recuperando la plaza» para «los auténticos michoacanos». Muchos marcan la consolidación de dicha ruptura con un acontecimiento que tuvo cierta repercusión mediática, cuando el 6 de septiembre de 2006, un comando de La Familia Michoacana, irrumpió en un centro nocturno de Uruapan y arrojó cinco cabezas decapitadas a la pista de baile.
Días después, dicha organización publicaría un desplegado en diversos medios, en donde haciendo uso de un peculiar lenguaje con tintes de fanatismo religioso, exaltación regional, y cierto afán vengativo y justiciero; aseguraban que combatirían actividades como el secuestro, el robo a casas habitación, las extorsiones, la venta de ice (metanfetamina) entre los jóvenes michoacanos y los asaltos en los caminos. Como veremos en la segunda parte de este texto, muy poco de esto tuvo lugar.
La Familia Michoacana fue uno de los grupos delictivos más activos y violentos del país.
Era la 01:00 de la mañana de 6 de septiembre de 2006, todo transcurría con normalidad en el centro nocturno Sol y Sombra, ubicado a un costado de la carretera libre Uruapan-Pátzcuaro.
En un momento determinado, un grupo de hombres armados entró al local haciendo disparos al techo. Todo se detuvo. Amagados por los hombres que portaban armas de grueso calibre, empleados, parroquianos y mujeres que ahí trabajaban se tendieron al piso, al menos eso se recogió de diversos testimonios.
Los hombres que llegaron al lugar llevaban bolsas negras de plástico y una a una sacaron cinco cabezas humanas, las cuales rodaron por el piso. Junto a las cabezas cercenadas, los hombres armados dejaron una cartulina con un mensaje escrito: "La Familia no mata por paga. No mata mujeres, no mata inocentes, sólo muere quien debe morir, sépanlo toda la gente, esto es justicia divina".
Después del macabro espectáculo, el comando se retiró rápidamente a bordo de una pickup gris y dos Cherokee verdes. Que se perdieron en la oscuridad de la noche. Aunque el reporte se hizo en cuanto el grupo se retiró, la Policía llegó hasta después de 40 minutos.
Ese hecho fue la tarjeta de presentación de la Familia Michoacana, que con el paso de los meses se volvería el grupo hegemónico en el estado, liderazgo que heredó su escisión, Los Caballeros Templarios.
En su momento se dijo que el hecho podría haber estado relacionado con otro crimen que llamó la atención de la prensa. Tres días antes, una mujer apodada La Jefa, conocida tratante de mujeres y narcomenudista, fue privada de la libertad, asesinada, decapitada y su cuerpo fue abierto desde el pecho hasta el vientre. Estaba embarazada. El cadáver fue abandonado en el puente de Jicalán, a la altura de la colonia Delicias.
Según investigaciones de la entonces Procuraduría General de Justicia del Estado, la mujer habría invadido con su mercancía la zona de influencia de un grupo criminal contrario, y para esto se valía de taxistas y personas dedicadas a la prostitución, pero fue descubierta y asesinada con saña.
Versiones recogidas por la prensa en aquel entonces registran que La Jefa era pareja de Carlos Rosales Mendoza, alias El Tísico, y La Familia Michoacana, que fundó Rosales Mendoza junto a otros mas, responsabilizó del crimen a miembros del Cártel del Milenio y/o Cártel de Los Valencia.
Sus líderes fundadores son Nazario Moreno González, "El Chayo", fallecido durante enfrentamientos con la Policía Federal, (Hay una historia que habla de que sus escoltas cansados de los malos tratos y de que este los asesinaba así de la nada en su ironía de que lo iban a entregar, lo ejecutaron no sin antes torturarlo aprovechando que descansaba en una cabaña mientras huían de los Federales y las Autodefensas), y José de Jesús Méndez, alias "El Chango Méndez".
Bajo su mando directo operaban:
- Carlos Rosales Mendoza, apodado "El Tísico", detenido en octubre de 2004 y ejecutado en 2015.
- Alberto Espinoza Barón "La Fresa", detenido el 31 de diciembre de 2008 en Morelia, actualmente se encuentra libre, se dice es el jefe de plaza, aunque no se sabe bien para que grupo, ya que trabaja también para operadores del Cartel de Santa Rosa de Lima (CSRL).
- Rafael Cedeño Hernández, "El Cede", detenido el 19 de abril de 2009, en Lázaro Cárdenas, Michoacán.
- Arnoldo Rueda Medina, alias "La Minsa", que fue capturado en julio de 2009 en Morelia.
José de Jesús Méndez, "El Chango Méndez", Enrique Plancarte, "La Chiva", y Servando Gómez Martínez, alias "La Tuta", fueron los últimos operadores del grupo original.
El antecedente directo de La Familia Michoacana es la organización delictiva conocida como "La Empresa", fundada por Nazario Moreno González, ejecutado por sus propios escoltas y José de Jesús Méndez, en el año 2000.
Tras su nacimiento, "La Empresa" se alió con Los Zetas, grupo armado del Cártel del Golfo, para sacar del negocio al grupo criminal encabezado por los hermanos Beltrán Leyva, vinculados en su momento al Cártel de Sinaloa, que encabezaba Joaquín "El Chapo" Guzmán, de quien dicen los propios Policías Judiciales de en ese entonces le servían de escolta cuando se encontraba en Michoacán, actualmente se encuentra preso en Estados Unidos.
En 2006, una serie de diferencias con Los Zetas rompió la alianza y surgió "La Familia Michoacana".
Una organización delictiva dedicada al tráfico de drogas, el secuestro, la extorsión, el contrabando y el asesinato de sus enemigos.
En pocos años La Familia pasó a ser un grupo criminal local a una organización delictiva regional.
Durante la cima de su poder, las brutales tácticas de la Familia Michoacana, su fuerte base de sus operaciones y su ideología pseudoreligiosa, hicieron del grupo una amenaza significativa y un punto de fascinación para los observadores internacionales.
Sin embargo, el grupo ha sufrido una serie de golpes, particularmente, la muerte del líder Nazario Moreno González, alias "El Chayo," quien falsamente fue reportado como muerto en 2010 pero luego fue ejecutado en 2014. La Familia fue sustituida en gran medida por un grupo disidente conocido como los Caballeros Templarios, los cuales también han sido fuertemente debilitados durante los últimos años.
Sin embargo, aunque no con el mismo poder, el grupo criminal continúa activo en la actualidad.
Historia
Michoacán ha sido durante mucho tiempo la sede de traficantes y productores de drogas, un lugar donde los agricultores más pobres cultivan marihuana y amapola, la materia prima de la heroína. Un grupo conocido como Cartel del Milenio, un aliado del Cartel de Tijuana, controlaba la zona de Michoacán a finales de los años noventa. Pero un pequeño grupo de lugartenientes se rebeló. Hay dos versiones acerca de lo que sucedió después: en la primera, los lugartenientes localizaron al Cartel del Golfo para derrocar a sus jefes; en la segunda, el Cartel del Golfo envió a Los Zetas para tomar el mando. En cualquier caso, en 2003, Los Zetas eran el nuevo poder en la región.
Los exlugartenientes del Milenio fueron entrenados por Los Zetas: buenos profesores pero malos terratenientes. Los locales los veían como forasteros represivos, y el resentimiento aumentó cuando Los Zetas expandieron su negocio a la producción de metanfetaminas. La Familia Michoacana surgió entonces como un grupo de vigilancia privada, volviéndose en contra de Los Zetas y atacando a los adictos y a los traficantes de metanfetaminas, droga que actualmente representa su mayor fuente de dinero. El grupo sacó con éxito a Los Zetas de Michoacán y se expandió a otros estados, incluyendo Guerrero, Morelos, Guanajuato, Querétaro, Jalisco y Ciudad de México.
La influencia de Los Zetas sobre la Familia y sobre su grupo escindido, los Caballeros Templarios, es aún visible, a pesar de que se convirtió en un enemigo mortal de los dos grupos. Al igual que Los Zetas, la Familia y sus herederos hacen uso frecuente de mensajes en vallas publicitarias para comunicarse con el público. También son excesivamente violentos, siendo el incidente más infame el de las cinco cabezas humanas arrojadas a un bar en 2006; el anuncio oficial de la existencia de la Familia. Los Zetas respondieron con propaganda, comparando a la Familia con “islamistas radicales”, “enloquecidos por el hielo” (metanfetamina).
La Familia fue orgullosamente regionalista y afirmó ganar el apoyo del público en el occidente de Michoacán, donde de alguna manera, durante su apogeo el grupo actuó como el estado de facto. La Familia resolvería las disputas locales, proveería empleo, y haría trabajo social. Empleando en ocasiones el lenguaje de una insurgencia política o de una cruzada evangélica. Así el grupo ganaría cientos de reclutas en unos pocos años.
Cuando la Familia estuvo en la cima de su poder fue una de las organizaciones criminales mexicanas más fuertes, sangrientas y poderosas, cuyas actividades iban desde el narcotráfico y el secuestro, a la extorsión y el chantaje sistemático. La Familia tuvo contactos internacionales para la distribución de metanfetamina, incluso en Holanda, India, China y Bulgaria. Los grupos criminales asentados en Estados Unidos, inclusive en las principales ciudades como Chicago, Dallas, Los Ángeles y Atlanta, conspiraron directamente con la Familia para enviar cocaína, un acontecimiento que sorprendió a los investigadores, considerando lo lejos que estaba el grupo de la frontera con Estados Unidos.
La proximidad a la principal ciudad portuaria de Lázaro Cárdenas, le dio a la Familia acceso a los cargamentos de cocaína procedentes de Colombia y a los precursores químicos para la producción de metanfetamina provenientes de Asia. Pero la lucha por el control del puerto fue mortal, y se calcula que 1.500 personas han muerto en la zona como consecuencia de enfrentamientos con la Familia. Además del tráfico de drogas, los esquemas de extorsión proveen a la Familia una fuente confiable de ingresos, y, en un momento dado, se pensaba que cerca del 85 por ciento de los negocios lícitos en Michoacán hacía pagos regulares al grupo.
Su líder, Nazario Moreno González, alias "El Chayo" o "El Más Loco" fue reportado muerto tras un tiroteo con la policía en diciembre de 2010 en Apatzingán, Michoacán. En enero de 2011, tras la supuesta muerte del líder, la Familia anunció su intención de “disolverse completamente”. El grupo declaró (en su típico tono "piadoso") que pretendía poner fin al sufrimiento de la población de Michoacán a manos de la policía federal.
Sin embargo, los informes de la muerte de El Chayo más tarde resultarían ser falsos, como se había dicho durante años. El 9 de marzo de 2014, funcionarios del gobierno confirmaron que el exlíder de la Familia, que se cree había trabajado a nombre de los Caballeros, acababa de ser dado de baja en un operativo de las fuerzas de seguridad en Tumbiscatío, sin embargo y de nuevo, esta vez las autodefensas desmintieron al Gobierno Federal, aunque el Chayo Moreno si había muerto no fue cierta la versión de que fue abatido mientras este huía arriba de un burro, las autodefensas fueron los que encontraron el cuerpo del Chayo Moreno, con visibles huellas de haber sido golpeado, al detener a sus escoltas, estos hablaron de que ellos cansados de los malos tratos y de que en sus alucinaciones el hasta entonces líder de la Familia Michoacana ejecutaba a sus escoltas, decidieron mientras dormía en una cabaña cuando huía de las mismas Autodefensas someterlo, golpearlo y ejecutarlo.
Parece que la muerte de Moreno provocó una ruptura entre dos jefes rivales del grupo, con José de Jesús Méndez, alias "El Chango," aliándose con La Resistencia. Mientras tanto, Servando Gómez, alias "La Tuta," formó los Caballeros Templarios, el cual anunció en marzo su aparición en escena, a través de pancartas públicas que decían que estaba reemplazando a la Familia.
De hecho, los Caballeros ganaron contra sus antiguos colegas de la Familia. Méndez, uno de los líderes que quedaban del grupo, fue arrestado en junio de 2011, y dijo a las autoridades que él había estado formando una alianza con los odiados Zetas —una movida que sugiere que estaba desesperado por buscar ayuda en contra de los Caballeros—. En noviembre de 2011, se informó que el gobierno consideró que la Familia estaba casi extinta, con los Caballeros apoderándose de gran parte de sus operaciones y redes.
Células desprendidas de la Familia Michoacana todavía participan en actividades de narcotráfico, secuestro y extorsión en áreas del estado de Guerrero. Un grupo conocido localmente como la Nueva Familia Michoacana también es activo en zonas de Guerrero y Michoacán, donde incluso extorsionan a los productores de aguacate junto con otros grupos criminales que tratan de aprovechar esta importante fuente de ganancias ilegales en la zona.
Liderazgo
La Familia Michoacana fue liderada por José de Jesús Méndez, alias "El Chango", quien se convirtió en la cabeza de la vieja guardia, cuando los Caballeros Templarios se escindieron en 2011. El Chango fue detenido en junio de ese año, y para noviembre, las autoridades consideraron a la Familia virtualmente extinta.
Incluso antes de la separación del grupo se pensaba que había hasta tres facciones internas dentro de la Familia, todas asociadas a varios carteles, una supuestamente vinculada al Cartel de Sinaloa, otra vinculada al del Golfo, y otra a la Organización Beltrán Leyva (OBL). Otras divisiones internas estuvieron presentes en la dirección del grupo, que fue dirigida por Moreno.
Cada célula regional presuntamente gozaba de un grado de autonomía. Mientras que una rama se dedicaría a la producción de metanfetaminas, otra extraería los pagos de extorsión, mientras otra podía estar compuesta por sicarios, y así sucesivamente.
Hoy en día, no está claro quién está a cargo de La Familia Michoacana, o de la denominada Nueva Familia Michoacana.
Geografía
Como indica el nombre de la Familia Michoacana, el grupo tenía su base y orígen en Michoacán, particularmente en la montañosa Sierra Madre del Sur. La zona de influencia de la Familia estaba localizada en siete municipios que conforman "Tierra Caliente", en el sureste de Michoacán, a unas 600 millas de la frontera con Estados Unidos.
La Familia también tenía células en los estados de Guerrero, Morelos, Guanajuato, Colima, Querétaro, Jalisco y Ciudad de México. Con el declive de la Familia han llegado informes de que el grupo se ha reducido en Guanajuato y el Estado de México.
El grupo es más activo hoy en día en los estados de Michoacán y Guerrero, en donde luchan por mantenerse en pie enfrentando a grupos como el Cartel de Jalisco Nueva Generación (CJNG) de Nemesio Oseguera Cervantes "El Mencho", de quien curiosamente cuenta la historia, cuando este era un simple Sicario, el mismo Chango Méndez intercedió por el para que El Chayo Moreno le perdonara la vida en una ocasión donde lo habían levantado por trabajar para otro grupo.
Aliados y enemigos
La Familia era famosa por su habilidad para corromper a los funcionarios del gobierno local, en parte debido a las enormes ganancias que se obtienen de la producción de metanfetaminas. El grupo gozó de profundas lealtades regionales gracias a proyectos sociales como la construcción de colegios, carreteras, y dando empleo en el tráfico de drogas, y especialmente, desempeñando el papel de la policía en la resolución de las disputas domésticas.
A principios de 2010, la Familia se vio involucrada en un conflicto amargo con el grupo sucesor de los Caballeros Templarios.
Lo que queda de la Familia busca ahora defenderse de las incursiones del CJNG y otros grupos armados más pequeños en las áreas del sur de México donde el grupo todavía está presente.
En 2011, las autoridades consideraban a la Familia Michoacana como una organización prácticamente extinta. Sin embargo, una redada policial en mayo de 2014 a una célula de la Familia Michoacana que operaba en Guerrero sugiere que el grupo criminal podría estar buscando ganar poder de nuevo en el suroeste del país, tras el debilitamiento de los Caballeros Templarios.
La Familia Michoacana ya es apenas una sombra de lo que solía ser, pero aún no ha sido completamente eliminada del paisaje criminal del sur de México, y continúa penetrando en comunidades locales clave para los intereses criminales del grupo.
Actividades más relevantes
- 19 de abril del 2009 - La Policía Federal Preventiva detuvo a 44 personas que se encontraban reunidas en una fiesta de bautizo en la ciudad de Morelia, Michoacán. Uno de los detenidos fue identificado como Rafael Cedeño Hernández (El Ceda), presunto líder del cartel en esa región.
- 26 de mayo del 2009 - Personal de la Policía Federal Preventiva detiene a 10 alcaldes de Michoacán y a otros 20 oficiales sospechosos de proporcionar protección e información al cártel. De estos, 27 fueron consignados a la prisión de mediana seguridad de Tepic, Nayarit. Aunque este evento fue conocido como el michoacanazo ya que nunca se demostraron los vínculos de los funcionarios con el cartel y se atribuye la finalidad de la acción a razones políticas considerando la proximidad de las elecciones intermedias y que el acto fue coordinado por Luisa María Calderón (hermana de Felipe Calderón presidente constitucional de México) la cual también pertenece al partido acción nacional, lo curioso es que los acusados implicados en su mayoría pertenecían al partido de la revolución democrática extremo polar del conservador acción nacional y partido en el gobierno de Michoacan en la persona de Leonel Godoy.
- 11 de julio del 2009 - Es detenido Arnoldo Rueda Medina (La Minsa), jefe operativo del cártel, con lo cual se desataron importantes ataques contra la Policía Federal en los estados de Michoacán, Guanajuato y Guerrero.
- 12 de julio del 2009 - Fueron hallados doce cuerpos, 11 hombres y una mujer, en la carretera Siglo XXI, confirmándose que se trataba de agentes de la Policía Federal que se encontraban realizando tareas de inteligencia. Asimismo un convoy de Policías Federales fue emboscado al momento de regresar a sus instalaciones, resultando dos elementos muertos. Ese mismo día es detenido el jefe de la plaza de Petatlán, Francisco Javier Frías (El Chivo), del cual se sospecha que participó en los atentados contra agentes federales ocurridos días atrás.
- 15 de julio del 2009 - Elementos de la Procuraduría de Justicia del Estado de Guanajuato detuvieron a cuatro sujetos ligados al cártel de la Familia, rescatando igualmente a una persona que mantenían secuestrada. El líder de esta célula es Francisco Javier Sotelo Barrera (El Pancho) y se ha confirmado que es sobrino de Servando Gómez Martínez.
- 16 de julio del 2009 - El Gobierno Federal anuncia el envió de 1500 efectivos de la Policía Federal, 2500 del Ejército y 1500 de la Armada de México al estado de Michoacán para reforzar las labores de vigilancia. Asimismo las labores de vigilancia se reforzaron con 67 bases de operaciones móviles y 9 de operaciones mixtas con personal militar y de la Policía Federal, 3 helicópteros UH-60 y 9 vehículos tácticos de incursión.
- 19 de julio del 2009 - Fueron arraigados 10 policías del municipio de Arteaga, Michoacán, que se presume tenían nexos con el cártel e igualmente están relacionados con el asesinato de los 12 agentes federales hallados el 12 de julio.
- 21 de julio del 2009 - Fueron detenidas 4 personas por elementos de la Policía Federal por su posible participación en el asesinato de 12 agentes federales. A uno de los detenidos se le aseguró una pistola Beretta 92 que pertenecía a uno de los agentes asesinados.
- 15 de agosto de 2009 - Es capturado Héctor Manuel Oyarzabal Hernández, presunto jefe de plaza en Ixtapaluca, Chalco y valle de Chalco en el Estado de México, junto con otras siete personas y en posesión de un arsenal.
- 23 de agosto de 2009 - Es detenido por elementos del ejército mexicano Luis Ricardo Magaña Mendoza (Alias 19 ½), jefe de plaza en Zamora junto con cinco de sus escoltas. Se presume que tenía contacto directo con Nazario Moreno y Jesús Méndez, principales líderes del cártel. El miércoles 26 del mismo mes, fue arraigado durante 40 días, para determinar su situación jurídica.
- 26 de agosto de 2009 - Elementos de la Policía Federal capturaron a tres sujetos, uno de los cuales aceptó su participación en la ejecución de doce agentes federales ocurrida el 13 de julio.
- 22 de octubre del 2009 - Fueron arrestadas 303 personas en Estados Unidos, como parte de la Operación Coronado, acusados de pertenecer al cártel la Familia Michoacana. En la operación participaron más de 3,000 agentes de diferentes cuerpos de seguridad de 19 estados. Las detenciones se efectuaron tras más de 44 meses de investigación; esta fue la mayor acción realizada por los Estados Unidos contra un cártel mexicano de drogas. Durante el operativo fueron incautados unos 500 kilos de marihuana, 350 kilos de metanfetaminas, 62 kilos de cocaína, US$3.4 millones, 144 armas y 109 automóviles.
- 25 de noviembre de 2010 - Envía Familia Michoacana comunicado, se retiran el mes de Diciembre.
- 8 de diciembre de 2010 - La Secretaría de Educación Pública (SEP) señala que aparece en documentos Servando González Martínez "La Tuta" como profesor de una escuela primaria en el municipio de Arteaga, en la misma ficha no aparece un perfil académico pero si que, cuenta con 15 años de servicio y que lleva los últimos 10 en el mismo nivel.
- 9 de diciembre de 2010 - Muere Nazario Moreno, líder del cártel, como producto de un enfrentamiento que duró varios días con las fuerzas de seguridad en el Estado de Michoacán.
- 10 de diciembre de 2010 - Dejan un saldo de 13 muertos y 30 heridos en el municipio de Tecalitlán, Jalisco, tras abrir fuego en las fistas religiosas de la localidad del mismo nombre.
- 14 de diciembre de 2010 - Familia Michoacana plantea tregua y advierte que el grupo de los Zetas prepara ataques.
- 31 de diciembre de 2010 - Detienen a Francisco López Villanueva, alias El Bigotes, líder de La Familia Michoacana en La Mira y Guacamayas, poblaciones cercanas al puerto de Lázaro Cárdenas.
- 3 de enero de 2011 - El cártel envía un comunicado en el que ofrece ampliar su tregua decretada durante el mes de enero con el fin de demostrarle a las autoridades, al Gobierno federal y al pueblo michoacano, que ellos no son culpables de los actos ocurridos en la entidad y de los cuales han informado los medios de comunicación.
- 5 de enero de 2011 - Detienen en Manzanillo a Juan Carlos Cruz Estrada o Nabor Pérez Chaires, mejor conocido como El 16, líder de la plaza de Zitácuaro, Michoacán.
- 21 de junio de 2011 - Detienen en Aguascalientes a Jesús Méndez Vargas alias "El Chango" uno de los ultimos lideres principales.